No ha sido nada fácil para los aficionados alrededor del mundo conseguir una explicación para el “desastre” que resultó ser la reaparecida del Campeón Arrogate (13, Unbridled’s Song en Bubbler, por Distorted Humor) el sábado pasado en Del Mar (California, EUA). Pero si alguien la ha tenido difícil por estas horas no es otro que Bob Baffert, el experimentado y súper ganador entrenador del Campeón de Juddmonte Farms.
Hoy, en entrevista publicada por Thoroughbred Daily News, el entrenador ofrece algunas explicaciones, aunque afirma que aún busca razones que expliquen el “extraño” comportamiento del calificado como “el mejor caballo del mundo”. Refiriéndose a la condición del ejemplar, Baffert dice: “Luce bien. Realmente luce bien. No parece que estuviera cansado ni nada por el estilo. Simplemente estuvo letárgico. Sencillamente no corrió, no quiso correr”. Señalando que hurgan sus cabezas todos alrededor del moro buscando lo que podría o lo que debería haber sucedido, el entrenador agrega: “Fisicamente, hemos estado muy pendientes. Lo chequeamos con el veterinario. Hemos chequeado su sangre y todo está normal. No ha mostrado signos de nada. Usualmente, entre 48 y 72 horas después de una mala carrera, si hay algo mal, esto se muestra. Pero él está brillante. Lo preparé un poco diferente a como lo hago para las grandes carreras. Tengo que hacerme cargo de la culpa. Aparentemente, no logré ponerlo en forma”.
“Cuando lo enviamos (a Del Mar) hacía calor y estaba húmedo, así que decidimos ir suave con él”, dijo Baffert. “No quiso correr, realmente no lo quiso hacer. He tenido muchos buenos caballos que lo han hecho. No sabes por qué. Y luego regresan y corren bien. En este momento, me siento muy confiado en que él va a retornar muy bien, después de esto”, siguió diciendo el individuo del Salón de Fama del hipismo estadounidense.
Aceptando que podría haber estado muy confiado, Baffert indicó: “Pensé que podría llevarlo allí (a Del Mar) y que daría un galope y sería invencible. Pero para ello tenía que tenerlo listo. No sé qué pasó, porque nunca me dio ninguna indicación de que iba a correr de esa manera”. Baffert enfatizó que lo próximo será seguir vigilando a Arrogate y regresarlo al entrenamiento con el Pacific Classic (G1, Del Mar, agosto/19) como objetivo. “Nos estamos asegurando que no se nos está pasando nada”, dijo. “Del Mar es un hipódromo muy difícil. No puedes ir muy lejos. No puedes correr como lo hizo en Dubai porque así no ganarías. Debes correr cerca”. Y, en seguida, refiriéndose a la carrera del sábado razona que se confiaron demasiado. “No culpo a Mike (Smith). No tenía caballo. Él se ocupó de cuidarle”. Y seguidamente afirma que “Arrogate no volverá a correr hasta que trabaje en buena forma”.
“En este momento, el principal objetivo es la Breeders’ Cup Classic (G1). No sé cómo lo llevaré hasta allí. Pero, por ahora, no veo por qué no correr en el Pacific Classic (G1)”. Como vemos, aparentemente, para Baffert no hubo otra razón que falta de condición física y se hace cargo de la culpa. Siendo así, todo debería cambiar, drásticamente, para la próxima salida de Arrogate, qué será cuando trabaje bien. Sin embargo, hay que recordar que para el San Diego H. (G2), iniciando sus trabajos en junio, el moro trabajo el 15 de julio los 1200m en 1:11.00, siendo el mejor trabajo de ese día en la distancia. Y luego vino lo que vimos. Tal como dijimos antes, ¡Amanecerá y veremos!